SEAMOS FRANCOS

Tengo para mí, lo digo francamente, que estos progresistas nuestros tiene un complejo de aúpa.

Seamos francos, llevamos mucho tiempo intuyendo muchos españoles que los métodos del PSOE -cuando llega al Gobierno o cuando lo busca desaforadamente, y la historia está ahí para demostrarlo- no distan en demasía de los empleados por el ogro del Caudillo, ese ser abominable que vino a exterminar la “legitimadísima” II República, advenida mediante una elecciones que los republicanos perdieron abrumadoramente y bajo cuya duración se supone que el Estado no mató a nadie, ni robo, ni violó, ni incendió, ni torturó, ni pretendieron golpes de estado las izquierdas cuando gobernaban las derechas, ni se cabreó al ejército, cosas veredes, por el Estatuto de Cataluña; pero, con franqueza, como buenos pecadores en el PSOE han sucumbido al de la envidia, y me figuro que por eso descabalgaron al jaco de Franco de su pedestal ante los Nuevos Ministerios, para que nadie les haga sombra, porque le tienen tirria, hay que ver con lo enano y feo que era lo que mandaba el hijo de la grandísima.

Vamos, seré franco, que yo también le tengo un asco tremendo, no porque nos librara de la “democrática” II República, sino porque vino a fastidiarnos durante 40 años y peor aún, y lo digo egoístamente, por su culpa a muchos de los que no lo padecimos nos revuelven las tripas los hijos, hoy talluditos, de alcaldes franquistas comparándonos con sus padres, ¡a nosotros!, que ni nacimos, ni mamamos de los pechos del Franquismo.

Seamos francos, muchos llevamos oyendo la COPE desde que el PSOE y Polanco nos echaron de Antena3 Radio y resulta que si no es por la clarividencia de un señor -cuyo nombre no vamos a mentar por temor a que explote algo en casa, que se vaya la luz, que la Giralda se caiga o que se hunda un barco, ¡menos mal que el Álvaro de Bazán ya no anda guerreando por el Golfo junto al Teddy Roosevelt!-, el “Gafe de la Bética”, como lo llamaba don Jaime Campmany, que Dios tenga en su Gloria, no sabríamos que la COPE hace apología del Franquismo.

A éstos les ha dado con Franco, Franco “pa´rriba” y Franco “pa´bajo”, y, seamos francos, le están haciendo, como al Cid, ganar batallas después de muerto y remuerto, pues si la COPE y el PP están llenos de franquistas, seamos francos, sumamos alrededor de 10 millones y, qué quieren que les diga, me parece una cifra que nadie el 20 de noviembre de 1975 se podría imaginar. Francamente.

Pero, con franqueza, somos los que no salimos a la calle el 13 de marzo, somos los que elegimos libremente dónde informarnos y no pedimos ni reprobaciones ni cierres de otros medios por muchos terroristas suicidas que no hubiera, somos los que no vamos a babear, y otras cosas, a Cuba y Venezuela con dinero público, somos los que defendemos la Constitución, somos los que no votamos al partido de los GAL y los asaltos a las arcas del Estado, los tráficos de influencias, las corrupciones, los convolutos, los pelotazos, los nepotismos, las endogamias partidistas, somos los que no hacemos “doctores honoris causa” a genocidas de los buenos o los menos buenos, somos los que no nos pasamos por el forro las leyes por ser muy restrictivas, somos los liberales -los que buscamos la presencia imprescindible, y nada más, del Estado en nuestras vidas-, los señalados como franquistas…

Por una vez, como se ha podido leer a lo largo de toda la columna, les voy a dar la razón: seré franco. Señores del PSOE políticamente dan ustedes asco, desde el inútil principal, hasta el más cavernario de sus votantes.