martes, julio 12, 2005

Apuntes para entender el Nacionalismo

Ante el cariz que están tomando las cosas en España, he considerado importante abrir este pequeño espacio para ir poniendo apuntes sobre el nacionalismo, que tanto daño ha hecho, y está haciendo a nuestro país.
Quizás así podamos aclarar de una vez por todas lo que realmente significa este concepto y sus consecuencias en esta nuestra sociedad.
"El nacionalismo es el núcleo duro del totalitarismo, su denominador común. El enemigo más persistente de la democracia. La quintaesencia ideológica que ha conducido al mayor número de genocidios. O en exclusiva, o combinado con otros ingrediente, se ha acompañado de la violencia y la supresión de los derechos personales." "El suicidio de España", Enrique de Diego, ed. Libros Libres.
Partiendo de esta base, ya podemos ver qué caminos sigue esta doctrina e imaginarnos cuál es el fin último de la misma.
"El imperialismo es el periodo triunfal de un nacionalismo: del nacionalismo de un gran pueblo. Ésta es la verdadera substancia del imperialismo. Ésta no se da en todas las naciones. No todas las naciones pueden llegar al hermoso momento de la floración imperialista". "La nacionalidad catalana", Enric Prat de la Riba.
La conveniencia de las comparaciones, aunque no tengan nada que ver entre ellas las dos situaciones.

"Irlanda es un mal ejemplo para los vascos. Probablemente no habrá un país cuya historia se parezca menos a la de Vasconia. Irlanda fue colonizada, sus católicos sufrieron persecuciones, el Imperio británico hizo de los irlandeses carne de cañon. Los vascos colonizaron en la misma medida, sino más, que otras gentes de la vieja Castilla; fueron tan católicos como sus reyes, y si sirvieron en los ejércitos imperiales, rara vez lo hicieron como clase de tropa. La imagen que nos devuelve Irlanda no es la nuestra. Ni siquiera nuestra imagen deformada, nuestro esperpento." "El bucle melancólico"Jon Juaristi, Ed. España-Hoy.

Para el nacionalismo es fundamental el control del individuo y la supeditación de éste a sus ideas. Creer en la perfección de unos ideales implica rechazar cualquier crítica a los mismos, pues al ser considerados superiores y absolutos, deben ser venerados. Esto es, la intolerancia frente a cualquier intento de pensar libremente o aceptar otros pensamientos ajenos a los postulados nacionalistas.

Y qué me dicen de los postulados de Sabino Arana, líder de la doctrina ultranacional vasca, "iluminado" del nacionalismo y "catedrático en ingenería social" quien, salvando la distancia temporal, aboga por un racismo enfermo y abyecto. O quizás era un simple loco, como Hitler:
"La fisonomía del bizkaino es inteligente y noble; la del español enexpresiva y adusta. El bizkaino es de andar apuesto y varonil; el español, o no sabe andar (ejemplo, los quintos), o si es apuesto, es tipo femenil (ejemplo, el torero). El bizkaino es nervudo y ágil; el español es flojo y torpe. El bizkaino es inteligente y hábil para toda clase de trabajos; el español es corto de inteligencia y carece de maña para los trabajos más sencillos. El bizkaino es laborioso (ved labradas sus montañas hasta la cumbre); el español, perezoso y vago (contemplad sus inmensas llanuras desprovistas en absoluto de vegetación). El bizkaino es emprendedor; el español nada emprende, a nada se atreve, para nada vale (examinad el etado de sus colonias). El bizkaino no vale para servir, ha nacido para ser señor; el español no ha nacido más que para ser vasallo y siervo. El bizkaino degenera en carácter si roza con el extraño; el español necesita de cuando en cuando una invasión extranjera que le civilice. El bizkaino es caritativo aun para sus enemigos; el español es avaro aun para sus hermanos. El bizkaino es digno, a veces con excesos, y si cae en la indigencia, capaz de dejarse morir de hambre antes que pedir limosna; el español es bajo hasta el colmo, y aunque se encuentre sano, prefiere vivir a cuenta del prójimo antes de trabajar. El aseo del bizkaino es proverbial; el español apenas se lava una vez en su vida y se muda una vez al año. Oíd hablar a un bizkaino, y escucharéis la más eufónica, moral y culta de las lenguas; oídle a un español, y si sólo le oís rebuznar, podéis estar satisfechos, pues el asno no profiere voces indecentes y blasfemias. El bizkaino es amante de su familia y su hogar; entre los españoles el adulterio es frecuente".

Pero no tenemos que remontarnos a la época de las colonias para ver con quién está gobernando el señor Zapatero. Sí, nos gobierna con un partido cuyos integrantes formaban el grupo terrorista llamado Terra Lliure. Y aquí vemos qué clara tenían ya su estrategia desde hace años:

"(...)Nada de lo que os voy a decir es nuevo para vosotros. Os lo dije ya, hace medio año, en algún lugar de Euskadi, cuando en nombre de mi partido os pedí, formalmente, que no actuaseis más en mi país. Habéis respetado la petición durante seis meses. Ahora, sólo me atrevo a pediros que, cuando queráis atentar contra España, os situéis, previamente, en el mapa." Josep Lluis Carod-Rovira, "ETA, Kataluñatik kampora!", Avui, 31 de mayo de 1991."


Después de todos estos apuntes ¿Hay alguien que no haya entendido todavía lo que significa el nacionalismo y sus orígenes? ¿Sabe realmente ZP con quién se está jugando los cuartos? ¿Quiere, de verdad, la sociedad española este futuro para nuestro país? ¿No deberían reaccionar ZP y los miembros de su desgobierno?

(Continuará)