Recuerdo con horror el día después de las elecciones generales, cuando ZP era aupado a la poltrona tras la masacre del atentando en Madrid el 11 de marzo. Me levanté pensando ¿Qué va a pasar ahora? Tenía la sensación de que se avecinaba una etapa oscura para nuestro país, nuestra vida cotidiana. Vamos, que después de haber vivido ocho años de vacas gordas, venían las vacas flacas. Supongo que mi intución no me falló entonces porque, en algo menos de dos años de gobierno socialista, el futuro se nos presenta muy negro.

Lo más gracioso es que ZP le dice al Sr. Rajoy que por favor dejen de alarmar innecesariamente a los ciudadanos pero, tal y como está España en estos momentos, todos los temores y recelos están bien fundados. Y lamento que al señor Zapatero no le guste que muchos españoles estemos bien informados de lo que ocurre en nuestro país. Para borregos, ya tiene él a sus votantes, que no ven más allá de sus narices. Pero que no pretenda idiotizarnos al resto, que ni votamos ni votaremos al PSOEZ. Si la voladura controlada de la Constitución Española no es motivo de preocupación, pues dígame usted a mí lo que debe preocuparme. O sea, quieren reventar la base político-social de mi país, donde existo, vivo y convivo, y ¿no es motivo de alarma? No sólo algunos miembros del PSOEZ, sino juristas y abogados están espantados con el nuevo proyecto de Estatuto que pretenden imponernos los independentistas catalanes ¿Acaso no es preocupante que los especialistas en leyes digan que dicho proyecto es una aberración? No, claro, según ZP hay que hacer caso a esos políticos radicales y extremistas que lo están proponiendo y que, para colmo, pretenden vendernos como lo que no es, un bien para todos.

Que ZP vive en otro mundo es algo que ya sabemos y sufrimos, pero no me puedo creer que sus colegas de partido compartan con él esas fantasías morunas que no harán más que llevarnos al desastre ¿Es que no se han parado a pensar que, en los momentos difíciles, el fuerte es el que sobrevive? ¿Es que no se acuerdan de que en España hay Comunidades más fuertes que otras? ¿Qué Comunidades sobrevivirían en esa "nación de naciones" que pretenden imponernos? ¿Está ZP realmente gobernando para todos, como él siempre alega? ¿A sus señorías socialistas no se les remueve la conciencia con la situación que se nos plantea respecto del Estatuto Catalán?

Pero una cosa quede clara, pase lo que pase, mi conciencia estará tranquila porque YO NO VOTÉ A ZP.*