lunes, octubre 01, 2007

EL PURO

"Puro" es un adjetivo, pero merced al artículo se produce la sustantivación, o sea, se convierte en sustantivo -gramaticalmente hablando-, y sucede esto sobre todo cuando hablamos del cigarro puro, donde "puro" ha invadido las competencias del verdadero sustantivo, "cigarro", que es llamado así, "cigarro puro", por no llevar papel, por estar liado con una hoja de tabaco, esto es, por tratarse de un cigarro confeccionado solamente con tabaco.

No he ido a boda, bautizo, comunión (todas cosas de fachas, que le vamos a hacer) en el que no hayan dado un puro, pero al señor José Blanco le parece que el hecho de que un tío joven se fume un puro (he aquí el pecador, Nacho Uriarte, pepero de pro)  lo aleja de la realidad, de la verdadera juventud porque los jóvenes no pueden permitirse esos lujos, lo dice el tío mientras va vestido con un traje -hortera, eso sí- que no bajará de los 400€, lo dice el Secretario de Organización del partido que hoy gobierna, cuyos colegas ministrados tienen gran afición a viajar en coche oficial, avión y hasta helicóptero, cosas que todos podemos permitirnos, 
menos mal que están nuestros progresistas para acercarse a la realidad que vivimos los pobres 
y desdichados conciudadanos.

Además del anterior "puro" tiene varios significados, veamos:


Fidel Castro, íntimo de la progresía nacional




Ernesto Guevara, alias el Che, ídolo de la progresía. Es Guevara a La cabaña lo que Azaña a Casas Viejas




Coñe... Este chaval me suena. Espero que sin don José Blanco se pasa por aquí no diga que el puro se lo regaló Fraga para que le hicieran la foto y dejarle a él mal 30 años después.




No he escrito esto para emplear contra el señor Blanco la falacia ad hominem del tipo tu quoque, sino para que quede constancia de la gilipollez que ha dicho. Una de ellas.