HASTA LA MUERTE, SIEMPRE

Anda el rojerío internacional muy alborotado por el aniversario de la muerte del Che, hete aquí al "héroe" fumando uno de esos puros que tanto molestan a don José Blanco, menos mal que Ernesto Guevara lleva 40 años muerto, si no la bronca de don José hubiera sido terrorífica, menos mal por eso... y por otras cosas, la de vidas que no se habrán salvado con su muerte. Si vamos a sitios web guevaristas leemos siempre que fue asesinado, esto aumenta su categoía de mito, pero es curioso que en esos mismos sitios se hable de Fidel Castro, el que lo vendió a Bolivia para que se lo diñaran, como de amigo, colaborador, hermano revolucionario, como de otro héroe, y no me cabe duda de que Castro lo es más que Guevara -que se pasó el juramento de Hipócrates por el forro de la gorra, el humo del puro, y la punta del fusil-; un tío que en pleno siglo XXI ha conseguido que llegara el contemporáneo y tecnológico invento de la "olla" a todas las casas de la isla cubana es un héroe. Es una curiosa paradoja esa de ser castrista y guevarista, sería como estar de acuerdo con Bruto y con César.

En esos mismos sitios se habla de su vida y milagros -yo nos lo veo así, veamos, para mí un milagro es resucitar a un muerto, como hizo Jesucristo con Lázaro, no matar a un vivo- y por supuesto se comenta su peripatética vida de régimen en régimen, no alimenticio, o sí, pero de aquél al que se veían constreñidos los pobres que tienen la suerte de padecer los placeres de las revoluciones de izquierdas, ninguno de ellos padecerá de obesidad, ni morirá de infarto, ni sufrirá gota. No se dice nada de La Cabaña, por ejemplo, y cuando se habla de Santa Clara sólo se hace como momento culminante para la liberación de Cuba, de los asesinatos que se llevaron a cabo allí ni pío. Dejo un enlace con algunas de las "maravillas" del Che, dado que hay tanta propaganda pro guevarista también habrá que contarle a la gente la verdad.

En estos días celebra la progresía internacional el aniversario de su muerte, yo simplemente celebro ésta. Fue lo único bueno que hizo el Che en su vida, acabarla.